La importancia de crear horarios de estudios para los hijos

Olkis Moyetones

Fotos: Pedro Hernández

Muchos de los problemas respecto al éxito en la escuela, giran alrededor del desarrollo de buenos hábitos de estudio, pues es necesario establecer rutinas para las comidas, la recreación, ir a la cama, estudiar y hacer la tarea. Tener una rutina de estudio, es tener un calendario de tareas, una idea efectiva para la creación del hábito de estudio, especialmente con niños entre 9 y 12 años de edad.

¿Cuánto tiempo para descansar después de haber llegado de la escuela?, ¿cuánto tiempo para organizarse?, ¿cuánto tiempo de televisión?, ¿cuándo comer? y ¿cuándo comenzar a estudiar?, son algunas de las interrogantes formuladas por los padres, madres y representantes a la hora de distribuir las horas de ocio del estudiante.

Mariana Cantillo, orientadora de la Unidad de Bienestar Estudiantil de la Zona Educativa, señaló que la creación de buenos hábitos garantiza una excelente disciplina, por lo que deben ser considerados los niveles de atención, distracción y retensión del infante o adolescente. “En el caso de estudiantes con dificultades para estudiar, deben ser remitidos a la orientara del plantel a fin de organizar un horario de estudio que se adapte a sus necesidades”, indicó.

Agregó, “la orientadora le pide realizar un registro de sus actividades diarias, luego de conocer sus actividades se establece una negociación con el alumno, lo que permitirá efectuar la planificación horaria, culminando con la elaboración de su proyecto de vida, de esta forma será más fácil involucrarlo y lograr su interés”, enfatizó Cantillo.

Aportes del plantel

La Zona Educativa, en el estado Yaracuy, cuenta con 122 orientadores distribuidos en las 720 instituciones educativas públicas, quienes tienen el deber de atender a toda la población estudiantil y asesorar, de ser requerido, en la elaboración de horarios de estudios, así como su proyecto de vida.

Yudith Montes, coordinadora de Orientación de Bienestar Estudiantil en la UE Casa Taller Cecilia Mujica, informó que los jóvenes desde primer año de básica hasta quinto año de media y diversificado cuentan con tutores, quienes con el apoyo de los orientadores y pedagogos de Bienestar estudiantil, elaboran los horarios de estudios de los estudiantes.

“Desde hace un año, hemos incorporado actividades que han mejorado el rendimiento de nuestros estudiantes como la consolidación de horas de tutorías, la cual consiste en brindar horas de asesoría académica a los alumnos con bajo rendimiento académico. De igual forma, incorporamos las asesorías pedagógicas para los estudiantes con materia pendiente, logrando en un 100% que los escolares aprobaran la materia pendiente y el año cursado”, explicó.

Es necesario – dijo Montes – que los padres, madres y representantes apoyen la labor que se realiza desde los planteles educativos, mediante la creación del hábito de estudios desde sus hogares. Son los padres, madres y representantes quienes deben supervisar, controlar, distribuir y elogiar, cuando sea meritorio, el trabajo realizado por los estudiantes.

Experiencias de madres

Con una hija de 12 años de edad, la cual acaba de entrar en una etapa difícil como lo es la adolescencia, y un bebé de 11 meses de edad, a Yarnelys Montero se le hecho difícil ejercer una supervisión constante en las actividades de su hija. Sin embargo, ella consiguió aplicar algunas estrategias para lograr crear un hábito de estudio en su primogénita.

“Siempre trato que su horario académico sea de un sólo turno, específicamente en las mañanas, durante los primeros días de clases observo en que materias presenta mayor dificultad y mi apreciación se la participo, al corroborarlo la coloco en tareas dirigidas, con el propósito de atender esas dificultades. Mi hija esta en octavo grado y asiste a clases de 7.00 de la mañana a 12.40 de la tarde, al llegar a la casa come, descansa y como las 2.00 de la tarde hace sus tareas, culminadas las asignaciones del día puede recrearse, pero los lunes, miércoles y viernes va a tarea dirigida, de 4.00 a 6.00 de la tarde”, explicó Montero.

Otro caso es el de Lolimar Hernández, quien tiene tres hijos, dos hembras de 16 y 9 años de edad y un varón de un año de edad, además trabaja en un horario irregular, unos días en el turno de la tarde y otros en el de la mañana, por lo que le ha costado controlar sus horas de ocio y estudio.

“Una compañera de trabajo, al notar mi preocupación, me sugirió colocar a la niña en tarea dirigida, con la cual tengo serios problemas por su conducta indisciplinada, además se la pasa metida en la computadora muchas horas, por lo que he trata de negociar, ahora esta en natación y creo que eso mejorará conducta. En cambio la mayor ya esta en la universidad y ella misma cuando siente deficiencia con una materia, a pesar de su dedicación, me pide que la inscriba en un curso”.

Consejos crear hábitos de estudio

Comenzar temprano

Las habilidades en la lectura son muy importantes para tener éxito en los estudios. Lee a tus hijos todos los días y ayuda a desarrollar su interés por la lectura.

Motivar la curiosidad natural

Converse con sus hijos, escúchelos y responda sus preguntas. Trate de exponer al infante a diferentes experiencias que le estimulen, siéntese con ellos en la computadora y explore los diferentes temas de estudio, en el caso de utilizar un libro, acuéstese en la cama con ellos y lean juntos.

Establecer un horario

Si trabaja y tiene poco tiempo, decida con ellos la hora en que se hacen los deberes desde que lleguen de su escuela. Es importante que los niños participen en la elaboración del horario, ellos necesitan saber que pueden decidir sobre sus estudios.

Si el horario no funciona

Dos períodos cortos de estudio en el día pueden ser más fáciles que uno más largo. Estudiar una hora al comienzo de la noche puede ser más adecuado que inmediatamente después de la escuela, experimente con varios horarios hasta que encuentre el adecuado.

Ofrecer un lugar tranquilo y cómodo

Procura que estudie en el mismo lugar todos los días, también asegúrese de que tienen el material necesario. Escoge una habitación o lugar de la casa en donde no haya muchas distracciones.

Ayuda en la organización

Ayúdele a crear un buen plan de trabajo y colócalo en un lugar, en el cual ambos lo puedan consultar fácilmente. Al apuntar que ejercicios tiene y cuando los tiene que entregar se irá acostumbrando a seguir un plan establecido, que le permitirá disfrutar del tiempo restante.

Deja que se responsabilice de sus deberes

No puede obligar a un niño a que estudie, ellos tienen que aprender que son responsables de sus estudios y deberes. Concédale más responsabilidad cada año, en el momento de establecer el horario para sus deberes.

Recomendaciones

• Para planificar el tiempo de estudio es necesario asignar un tiempo determinado a cada asignatura, en función de su dificultad.
• Elaborar un calendario e intentar, en la medida de lo posible, conseguir los objetivos o metas propuestas.
• La planificación del estudio debe estar hecha a la medida de cada uno, a su ritmo de trabajo y aprendizaje.
• Una buena planificación, además de dar cabida al estudio, debe reservar tiempo para el ocio y el descanso. Se necesita descansar un mínimo de 8 horas diarias.
• Hacer la lista de los trabajos diarios siguiendo el orden de los más urgentes a los menos y por orden de dificultad.
• Toda planificación debe ser flexible, es decir poder ajustarse a posibles cambios y dificultades no previstas.
• El horario de estudio deberá determinar el tiempo según el nivel de dificultad: Alta, 30 minutos de estudio y 10 minutos de descanso; Media, 60 minutos de estudio y 15 minutos de descanso; Alta, 90 minutos de estudio y 20 minutos de descanso.